El tratamiento de la adicción implica transitar por distintas fases acordes con los objetivos terapéuticos de cada momento. Dejar de consumir va más allá de finalizar la ingesta de la sustancia adictiva (alcohol, marihuana, cocaína, etc.) o de parar con la conducta problemática (juego, sexo, nuevas tecnologías, etc.). La adicción es un trastorno mental crónico que requiere un apoyo profesional especializado con el fin de recibir la cobertura terapéutica necesaria para cada reto que surge dentro del proceso de recuperación.

Las fases que componen el tratamiento son:

  1. Asesoramiento terapéutico
  2. Desintoxicación y adaptación
  3. Deshabituación y cambio de hábitos
  4. Rehabilitación
  5. Reinserción y seguimiento

En el presente post, nos centraremos en la última fase: la reinserción y el seguimiento. Se puede acceder al contenido del resto de fases en otros posts de nuestro blog.

En este estadio, el objetivo consiste en la progresiva inserción de la persona en los distintos contextos con el apoyo del equipo terapéutico del centro.

Llegados a esta fase, el/la paciente ha adquirido recursos y herramientas para hacer frente de forma saludable a las situaciones que deberá afrontar.  Se hará un seguimiento profesional de los pasos ejecutados con el fin de reajustar posibles mejoras para las nuevas ocasiones que surgirán.

A lo largo de este período, se incluirán los siguientes aspectos:  

  • Reintroducción progresiva y segura a los distintos entornos en los que quiere participar. Por ejemplo, a nivel familiar y de pareja, social, académico, laboral, de ocio, etc.
  • Trabajo terapéutico en relación a los frentes que van surgiendo con los avances incorporados.  Se ofrece cobertura terapéutica para incidir en aquellos aspectos que requieren atención y mejoría en la gestión y/o en la vivencia.
  • Normalización de la cotidianidad en la sociedad de forma autónoma y responsable. La persona con adicción integra una vida sin consumo con un funcionamiento propio saludable en los distintos ámbitos en los que forma parte.
  • Petición de apoyo cuando se requiere ayuda o soporte. A lo largo del tratamiento, se integra la potente habilidad de tomar conciencia y pedir ayuda ante la aparición de algún malestar para hacerle frente de forma exitosa.

Lograda esta última fase de tratamiento, el/la paciente recibe la alta terapéutica, la cual implica que ha adquirido las herramientas para poder vivir sin consumo siguiendo el funcionamiento que ha adquirido e interiorizado a lo largo del proceso terapéutico. Aún así, es importante destacar que la adicción es una enfermedad crónica, motivo por el cual, siempre se debe mantener la conciencia y atención hacia ella con el fin de evitar una recaída. Por este motivo, a pesar de  haber logrado la alta, los/las pacientes pueden contactarnos y/o acudir a nuestro centro siempre que lo necesiten.